El presidente francés, Emmanuel Macron, denunció este viernes que el embajador de su país en Níger ha sido tomado como rehén por los golpistas de ese país.
El embajador, Sylvain Itté, y varios diplomáticos han sido «tomados literalmente como rehenes» en la propia embajada gala en Niamey, dijo Macron en un conversación con los periodistas franceses que le acompañaban en un desplazamiento interno.
El dirigente galo explicó que el diplomático «no puede salir» y que los militares impiden introducir comida en la legación diplomática, que debe de alimentarse de «raciones militares».
Las relaciones entre París y Niamey son tensas. Francia considera como presidente legítimo al derrocado Mohamed Bazoum, cautivo de la Junta Militar en el poder, y rechaza las reivindicaciones de los golpistas.
El nuevo poder reclama la marcha del embajador francés, declarado «persona non grata», y denunció los acuerdos militares con Francia, que tiene desplegados 1.500 soldados en un dispositivo de lucha antiyihadista.
Preguntado sobre una eventual repatriación del embajador, el mandatario aseguró: «Haré lo que acuerde con el presidente Bazoum, porque es la autoridad legítima y hablo con él cada día».
Antes del golpe del 26 de julio, este país del oeste de África y antigua colonia francesa era uno de sus últimos aliados en el Sahel.